“¡¡¡Mierda!!! Meses de ensayo, toda una parafernalia pirotécnica preparada, millones de dólares de montaje, millones de personas y la Super Bowl esperándonos y ¡Se pone a llover a cántaros! ¡El diluvio universal!”
Esto es lo que podríamos haber pensado y dicho si nos hubiéramos encontrado en la misma situación que Prince.
Pero cuando llamaron a Prince para decirle que llovía y le preguntaron que hacían con el espectáculo, él contestó: “¿Puedes hacer que llueva más fuerte?”
Te recomiendo que veas este vídeo de aquél épico momento. Espectacular ejemplo. En él verás cómo hace de la adversidad una oportunidad y cómo se hace fuerte ante ella para darle la vuelta a la tortilla. Merece la pena verlo entero.
Como sabes me gusta predicar con el ejemplo, y la verdad es que la vida me ha dado muchas oportunidades para “lucir” mi actitud positiva y resiliente.
De este año pasado puedo enumerar el caso del robo de mi maleta por valor 5.300€ (con el portátil nuevo con menos de una semana), estar retenido en un aeropuerto que no es de mi ciudad sin DNI, tarjetas de crédito ni ningún otro tipo de identificación ni dinero (prueba a imaginarte en esta situación) y algunas otras situaciones más duras que me reservo. Un fantástico año de aprendizaje que ha puesto a relucir mi actitud.
Sin embargo esta actitud no ha sido siempre así de positiva y resiliente. Cuando era más joven hubiera reaccionado justo como el comienzo de este post. ¿Y qué es lo que ha producido este cambio de actitud en mí? Pues básicamente un trabajo interior de autoconocimiento e inteligencia emocional. Con el tiempo y trabajo (y con ayuda) he podido llegar al punto en el que estoy y del que me siento muy satisfecho. Creo que en la situación de Prince hubiera reaccionado como él. A día de hoy me considero (y me consideran) un ejemplo de positivismo, resiliencia y de transformar las adversidades en oportunidades. Como por ejemplo el día que decidí coger el coche para recorrerme casi 1.000 km (no me gusta conducir) e ir a cuidar a mis sobrinas porque estando de vacaciones mi cuñada sufrió un problema grave de salud. ¡Con lo pillado que voy de tiempo! En este vídeo explico la situación y mi actitud.
La clave está en ser consciente que tú no puedes decidir algunas circunstancias que te rodean pero sí decides tu actitud ante ellas.
Tú puedes cambiar tu vida, pero el camino es duro. Por eso aunque mucha gente sabe que viviría mejor no termina de dar el paso del autoconocimiento.
A mi otra de las ayudas importantes para disponer de esta actitud han sido los 18 años que llevo como músico de improvisación libre. En este post te explico todo lo que la improvisación musical me ha dado y de lo que estoy eternamente agradecido (a ella y a los músicos con los que tengo el placer de tocar).
Te invito a que desarrolles la habilidades de la flexibilidad e improvisación, fundamentales en el entorno VUCA del siglo XXI.
Recuerda: TU DECIDES.