A veces una simple herramienta al alcance de todos o un pequeño hábito puede marcar la diferencia entre un éxito o un fracaso.
Frente a los que dicen que las ideas no valen nada, yo te digo que valen mucho. De hecho una magnífica ejecución de una «mala» idea puede ser una ruina, en todos los sentidos.
Así pues en esta píldora te doy un consejo para poder aprovechar tus ideas. Algo fácil de aplicar nada más termines de visualizarla o escucharla. A veces en lo sencillo puede estar la clave.
¡Qué la disfrutes!