Me invade la curiosidad y googleo STEM y STEAM para ver cuántos resultados da cada palabra. Más o menos los mismos: STEAM (643M) y STEM (649M). Y me pregunto ¿Por qué, especialmente en España, se está potenciando sólo el STEM? ¿Qué hacemos con la “A”? Luego descubro que STEAM es también el nombre de un famoso videojuego “ahhh, valeee”.
Repasamos: STEM (Science, Technology, Engineering, Maths) es un movimiento que pretende potenciar estas 4 disciplinas en la educación. STEAM incorpora el Arte y el diseño a esas 4 disciplinas. Sin embargo aún se está promocionando más el STEM que el STEAM.
Para entender por qué está pasando esto nos deberíamos quizás ir a varios siglos atrás. Hubo un tiempo en que iglesia y ciencia se entendían, pero para evitar el exceso de poder de la Iglesia o quizás el ansia de poder del Estado, hicieron que se repartieran los papeles: el Estado se quedaría con los aspectos de la ciencia y otros asuntos “pragmáticos” y “mundanos”, y la Iglesia los temas del espíritu, del alma. Y entre ellos estaba, cómo no, el arte.
Pero sin duda para entender mejor este arrinconamiento del arte (y el diseño) en el sistema educativo y productivo nos debemos ir al siglo XVIII, en la primera Revolución Industrial. Cuando se pasa de la producción artesana a la producción industrial, cuando la gente pasa del campo a la ciudad ante un aumento exponencial de la necesidad en las fábricas de mano de obra… ¿Cualificada? Mejor llamémosla especializada. ¿Y qué pasó entonces? Que todo el sistema se preparó para servir a las fábricas. Y pasamos de esas épocas donde se valoraba al ser humano ilustrado, generalista, polímata, a valorar al especialista, al que supiera hacer muy bien sólo la tarea que le ha sido encomendada, alguien muy eficiente, que no pensara, solo ejecutara. Y en este nuevo paradigma, el arte no encajaba, porque existía la creencia de que el arte y el diseño están muy bien, pero… no es práctico, no da un ROI en el corto plazo, no es rentable.
Y este paradigma y esta creencia nos han acompañado hasta hoy en día.
¿Por qué creo que el arte y el diseño son fundamentales para los tiempos que vivimos?
1.- Desarrolla el cerebro, sus 2 hemisferios.
Es muy probable que ya lo sepas, pero por si acaso te cuento que nuestro cerebro tiene dos grandes partes o hemisferios. El izquierdo es el lado racional, estructurado, pragmático. El derecho es el emocional, imaginativo, intuitivo. ¿Y sabes un secreto? Los dos son igual de importantes. Arriesgando un poco diría que el derecho más, pero voy a huir de la polémica. El caso es que el sistema educativo, paradójicamente, ha potenciado el desarrollo del izquierdo, desde la manera de educar, las materias que se imparten o los medios para evaluar al alumno. ¿Y en la empresa? Exactamente lo mismo, porque entre otras cosas los que dirigen las empresas han sido formados dentro del mismo sistema educativo que los demás: así las formaciones, los procesos de selección, y la manera de, por ejemplo, cuantificar los incentivos de los empleados, siguen patrones más del lado izquierdo de nuestro cerebro.
Ahora bien, desde hace no mucho tiempo entra en acción el “Pensamiento de Diseño” (Design Thinking) como pensamiento clave para el management del siglo XXI. Todas las escuelas de negocios se vuelven locas por incorporar esta formación en sus programas de alta dirección. Resulta que el pensamiento de diseño añade al razonamiento científico preponderante, el inductivo y deductivo, otro razonamiento el abductivo. Los primeros buscan la verdad, el abductivo la utilidad. Los otros usan datos del pasado para predecir el futuro. Éste busca imaginar lo que es posible, y diseñar el futuro. ¿Os imagináis a un comité de dirección donde ante los presupuestos anuales, alguien diga que no tiene ni idea de lo que va a ocurrir, y que ha hecho sus presupuestos en base a lo que le gustaría que pasara? Yo no creo que este pensamiento abunde, pero en los tiempos que corren no es descabellado que vayamos hacia este tipo de pensamiento, para el cual más vale que empecemos a entrenar también el lado derecho del cerebro, por ejemplo a través del arte y el diseño.
Sólo a modo de ejemplo, y por si alguien le cabe duda de lo que puede hacer el arte por tu cerebro, os dejo este vídeo TED (dale a los subtítulos si no te llevas bien con el inglés).
2.- Las habilidades humanas para el siglo XXI
Resulta que hemos visto como el World Economic Forum saca un informe que dice que las 3 principales habilidades para el éxito en entornos empresariales en el 2020 son la resolución de problemas complejos, el pensamiento crítico y la creatividad. Pero es que entre las 10 primeras se encuentran otras como la inteligencia emocional, la gestión de personas, la flexibilidad cognitiva, etc., etc. ¿Y qué tienen estas habilidades en común? Pues que son habilidades que se trabajan en los mismos lugares del cerebro que trabaja el arte y el diseño.
Deja que te cuente una historia personal. Hace 18 años comencé una extraordinaria aventura, que aún dura, como músico de improvisación y jazz. Una de esas experiencias que han marcado y marcan mi vida y me han configurado como soy, como también lo ha hecho el haber sido boy scout, montar empresas o tener un hijo. La música y la improvisación me han dado mucho. Me han ayudado a entender, a escuchar, a comunicarme sin palabras, a ganar confianza en mí, respetar y gestionar la diversidad, a gestionar la incertidumbre, a tomar decisiones. Casi nada. ¿Te das cuenta que estas habilidades están relacionadas con las habilidades para el siglo XXI?
Hace unos cuantos años estudié la carrera de ingeniero de diseño. En aquella época pude disfrutar de una formación holística y humanista. Al igual que aprendía cálculo, algebra, análisis matemático o fabricación asistida por ordenador, estudiaba diseño y factores humanos, ergonomía, medioambiente, historia (de Europa, del diseño, de las primeras civilizaciones…), economía y por supuesto expresión artística, teoría del color, expresión gráfica, estética, etc. En definitiva, una formación integral y holística. ¿Y qué pasó? Que hace unos 25 años, al terminar mi carrera, cambiaron el plan de estudios y redujeron “casualmente” la carga de asignaturas “no técnicas”, las que no estaban relacionadas directamente con el ejercicio de la profesión. Una pena. Cada día y cada año que pasa estoy más agradecido por la oportunidad de haber tenido una de las pocas formaciones completas que se pueden recibir en este país. La pena es que esto no es la tónica general. Ahora que llegan las habilidades “blandas” como la clave para las empresas del siglo XXI, ¿cómo se lo van a montar en las escuelas y en las empresas?
3.- Los robots y la inteligencia artificial
John Maeda fue entre otras cosas profesor en el MIT Media Lab durante 12 años y nombrado en 1999 una de las 21 personas más importantes para el siglo 21 por la revista Esquire. Pero es que además lideró el movimiento para transformar el STEM en STEAM (añadiendo el arte y diseño). Hace más de 2 décadas sentenció:
Creo que el arte y el diseño están listos para transformar nuestra economía en el siglo XXI como lo hizo la ciencia y la tecnología en el siglo pasado.
Yo no sé si este hombre ya vislumbraba lo que iba a venir, pero el caso es que dio en el clavo. Los robots y la inteligencia artificial van a cambiar la manera en la que vivimos y trabajamos, como otras tecnologías e inventos lo hicieron en el pasado (imprenta, teléfono, TV, internet, etc.). Y como en otras ocasiones, se destruirán profesiones para crear otras. La diferencia es que quizás ahora tengamos la oportunidad de dejar a las máquinas que trabajen por nosotros, y reducir así sustancialmente el tiempo que dedicamos a trabajar. Al menos esto quiero pensar yo. El caso es que el trabajo que nos quedará será el de crear nuestro futuro, y en eso las máquinas no están muy duchas. Recuerda lo del razonamiento deductivo e inductivo propios del pensamiento científico lógico-racional, que usa los datos del pasado (big data) para predecir el futuro. Para crearlo debemos de añadir el razonamiento abductivo, que crea, a través de la imaginación y la intuición, los datos para diseñar ese futuro. Y para eso no hay nada como el pensamiento del diseño y del arte, que añaden el lado derecho del cerebro.
Así que señores y señoras, metan arte y diseño en sus escuelas desde los 3 años (o antes), pero no como una maría más, sino como parte fundamental del desarrollo de las personas. Señoras y señores de las empresas, metan diseñadores, artistas, filósofos y humanistas, auténticos polímatas que aporten el valor que las máquinas no aportan.
Pasemos del STEM al STEAM. Una sola letra puede marcar la diferencia.
No lo hagan por que se lo diga yo u otros locos como yo.
Háganlo por ustedes, por los resultados de sus empresas, por la humanidad. En la era digital necesitamos un nuevo renacimiento. Estamos en un nuevo renacimiento.